@mariamonterofoto
El bubble tea, té de burbujas, boba tea o té de perlas se inventó en Taiwán en la década de los 80, cuando la tradicional cultura del té comenzaba a abrirse a propuestas más modernas, como el té con hielo. Su origen exacto es incierto, pues hay dos casas de té que se disputan la autoría de la receta, pero ambas versiones coinciden en que al experimentar mezclando té helado con perlas de tapioca (que forman parte de un postre tradicional taiwanés) el resultado tuvo gran aceptación. Y esto sí es innegable, pues el té de burbujas ha traspasado fronteras y se ha hecho muy popular en muy poco tiempo.
El bubble tea clásico (cuya receta os presentamos a continuación) contiene té negro endulzado, leche y bolas de tapioca. Pero, a raíz de su éxito, han surgido infinidad de variantes con otros tipos de té, diferentes leches vegetales, purés o zumos de frutas, e incluso gelatinas de sabores o esferas de fruta. Todo un abanico de posibilidades que han hecho que proliferen las tiendas dedicadas exclusivamente a esta bebida, en toda China y también en otros países de Asia, Europa y América.
El éxito del té de burbujas reside probablemente en lo divertido que resulta su consumo; tomar un sorbo dulce y refrescante, y al mismo tiempo masticar las perlas, que tienen una textura parecida a las gominolas. Para ello se utilizan unas pajitas más gruesas de lo normal, que permiten pasar las bolas de tapioca y que lleguen a la boca junto con el líquido. Si no disponemos de estas pajitas, siempre podemos beber el té del vaso y utilizar una cuchara para tomar las perlas. Las perlas de tapioca, podremos conseguirlas fácilmente en tiendas especializadas en alimentación asiática y el azúcar de coco, en herbolarios.
Información de la receta
Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de cocinado: 45 minutos
Tiempo total: 50 minutos (más una noche de reposo)
Raciones: 4
Categoría: bebidas
Tipo de cocina: taiwanesa
Calorías por ración (kcal): 216
Ingredientes del té de burbujas para 4 personas
100 g de perlas de tapioca grandes
50 g de azúcar de coco
10 g de té negro en hojas
Hielo
500 ml de leche
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Cómo hacer té de burbujas
Para comenzar, preparamos las burbujas: cocemos 100 g de perlas de tapioca grandes en agua hirviendo, según las indicaciones del fabricante. En este caso, debemos cubrirlas holgadamente con agua, cocerlas a fuego suave durante 20 minutos y dejarlas reposar en esa misma agua durante toda una noche. Si las bolas empiezan a estar translúcidas, pero aún tienen el centro blanco significa que les falta cocción.
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Pasado el tiempo de reposo, escurrimos las perlas del líquido y reservamos este en un cuenco. Ponemos en un cazo 50 g de azúcar de coco y 3 cucharadas del líquido de cocer las perlas —reservamos el líquido restante para el siguiente paso—. Llevamos a ebullición y removemos durante 2 o 3 minutos hasta que el azúcar se disuelva y quede como un almíbar.
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Mezclamos este almíbar con las bolitas de tapioca y volvemos a cocerlas otros 20 minutos a fuego suave, removiendo y vigilando de cerca para que no se peguen al fondo del cazo. Si quedan secas, vamos añadiendo cucharada a cucharada el líquido que teníamos reservado. Si este se nos termina, añadimos simplemente agua.
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Una vez cocidas, las perlas deberían quedar oscuras, blandas y elásticas. Las reservamos con su almíbar.
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Mientras las perlas se terminan de hacer, podemos preparar el té: colocamos en una tetera de 1 litro de capacidad 10 g de té negro en hojas y añadimos agua a punto de hervir (entre 80-90º C) hasta llenar la tetera. Dejamos infusionar unos 3 o 4 minutos y retiramos las hojas de té. Si nos gusta muy dulce, podemos endulzarlo con azúcar de coco u otro edulcorante de nuestro gusto, teniendo en cuenta que las perlas de tapioca van a aportar azúcar a la bebida final.
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Ya podemos servir nuestro té de burbujas. Para servirlo, en un vaso grande ponemos un par de cucharadas de bolitas de tapioca.
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Añadimos bastante hielo, todo el que quepa en el vaso.
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Vertemos leche hasta la mitad del vaso aproximadamente, unos 125 ml por vaso.
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Terminamos de rellenar cada vaso con el té negro.
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¡Y listo para tomar!
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Resumen fácil de preparación
Cocemos las perlas de tapioca en agua y las dejamos reposar una noche entera
Hacemos un almíbar con el azúcar de coco y un par de cucharadas de agua de cocción de las bolitas
Mezclamos el almíbar con las perlas de tapioca y las volvemos a cocer
Cuando las bolas de tapioca estén blandas, las reservamos con el almíbar
Preparamos la infusión de té negro y lo dejamos reposar
Servimos un par de cucharadas de perlas de tapioca en cada vaso
Añadimos hielo abundante
Agregamos leche hasta la mitad de los vasos
Añadimos el té negro
Disfrutamos de nuestro té de burbujas